L'alergia al gluten es una reacción inmunitaria anormal del organismo a la presencia de gluten, que es una proteína que se encuentra en ciertos cereales como el trigo, la cebada y el centeno. Los síntomas de esta alergia pueden variar de una persona a otra, pero pueden ser bastante graves y afectar la calidad de vida de quienes la padecen.
La alergia al gluten es bastante rara, pero puede ser peligrosa en los casos más graves, provocando una reacción alérgica severa llamada anafilaxia. Por lo tanto, es importante diagnosticar la alergia al gluten desde los primeros síntomas y evitar cualquier contacto con los alimentos que contengan gluten para evitar complicaciones. En este artículo, vamos a examinar de cerca los síntomas y las causas de esta alergia.
¿Cuáles son los síntomas en el lactante ?
Los lactantes pueden desarrollar una alergia al gluten, aunque esto es relativamente raro. Estos síntomas pueden incluir:
- Problemas gastrointestinales como dolores abdominales, diarrea o estreñimiento, vómitos.
- Una pérdida de apetito y de peso.
- Una erupción cutánea, picazón o urticaria.
- En algunos casos, síntomas respiratorios como sibilancias, tos o dificultades para respirar.
- Fatiga, anemia, pérdida de actividad y vivacidad.
- Crecimiento lento y retraso en el desarrollo del bebé.
¿Cuáles son los síntomas en el niño ?
La alergia al gluten puede surgir durante los años de crecimiento del niño y no necesariamente desde el nacimiento. Estos son los síntomas que pueden aparecer en un niño:
- Problemas digestivos como dolores abdominales, vómitos, diarrea, estreñimiento e hinchazón.
- Una erupción cutánea con picazón o urticaria.
- Irritabilidad y fragilidad de los dientes.
- Síntomas respiratorios como sibilancias, tos o dificultades para respirar.
- Dolores de cabeza o migrañas.
- Fatiga o debilidad.
- Dolores musculares o articulares.
- Retrasos en el crecimiento o problemas de desarrollo.
¿Cuáles son los síntomas en el adulto ?
Los síntomas de la alergia al gluten en adultos pueden variar de una persona a otra, pero pueden ser bastante graves y afectar la calidad de vida de quienes la padecen. Los síntomas pueden aparecer desde unos minutos hasta unas horas después de haber consumido alimentos que contienen gluten. Pueden incluir:
- Problemas gastrointestinales como dolores abdominales, vómitos, diarrea, estreñimiento, hinchazón y gases.
- Dolores de cabeza o migrañas y fatiga.
- Dolores articulares o musculares.
- Trastornos del estado de ánimo, ansiedad o depresión.
- Problemas de concentración o de memoria.
- Entumecimiento u hormigueo en las manos o los pies.
- Síntomas cutáneos como erupciones cutáneas, picazón o urticaria.
- Algunas personas también sufren de anemia o de osteoporosis.
- Síntomas respiratorios como dificultad para respirar, sibilancias o tos.
- En casos raros, puede ocurrir una reacción alérgica grave llamada anafilaxia, que puede provocar pérdida de conciencia e incluso poner en peligro la vida de la persona.
Es importante señalar que estos síntomas también pueden ser causados por otros problemas de salud en estas categorías de edad, por lo que es fundamental consultar a un médico para obtener un diagnóstico preciso y un plan de tratamiento adecuado.
¿Cómo saber si eres alérgico al gluten ?
Los síntomas y signos mencionados pueden indicar que usted es alérgico al gluten. Sin embargo, estos síntomas pueden variar de una persona a otra y también podrían estar asociados con otros problemas de salud. Por lo tanto, la forma más confiable de determinar si usted es alérgico al gluten es consultar a un médico especialista en alergología o inmunología para un diagnóstico más preciso. Así es como se lleva a cabo el diagnóstico:
Examen médico y antecedentes de salud: El médico comenzará por hacerle preguntas sobre sus síntomas, sus antecedentes médicos y su dieta para determinar si es posible que tenga una alergia al gluten.
Análisis de sangre: El médico puede solicitar un análisis de sangre para verificar la presencia de anticuerpos IgE específicos al gluten. Estos anticuerpos son producidos por el sistema inmunitario en respuesta a una alergia al gluten.
Prueba de provocación oral: Se solicita en el caso de que las pruebas de sangre sean negativas. En esta prueba, el paciente es expuesto a cantidades crecientes de gluten bajo supervisión médica para ver si se presentan síntomas de alergia.
Eliminación de alimentos que contienen gluten: Si las pruebas confirman una alergia al gluten, el médico probablemente recomendará eliminar todos los alimentos que contengan gluten de su dieta para aliviar los síntomas. La persona deberá entonces consumir alimentos sin gluten, como frutas y verduras, legumbres, productos lácteos que no contienen gluten de manera natural, o también existen alimentos que contienen gluten de manera natural y que se pueden encontrar en versión sin gluten, como pan sin gluten, pasta sin gluten o incluso wraps sin gluten.
¿Cuál es la diferencia entre la enfermedad celíaca y la intolerancia al gluten ?
La enfermedad celíaca y la intolerancia al gluten son dos condiciones distintas, aunque presentan síntomas similares e implican ambas una intolerancia al gluten.
La enfermedad celíaca es una enfermedad autoinmune en la que el sistema inmunológico reacciona al gluten y ataca las células del intestino delgado, provocando inflamación y daño tisular. Las personas con enfermedad celíaca deben evitar completamente el gluten, ya que incluso pequeñas cantidades pueden desencadenar una reacción inmunitaria que daña su intestino delgado. Los síntomas de la enfermedad celíaca pueden incluir problemas gastrointestinales, así como síntomas no gastrointestinales como dolores de cabeza, fatiga y dolores articulares.
L'intolerancia al gluten no celíaca, en cambio, es una condición en la que las personas presentan síntomas similares a los de la enfermedad celíaca en respuesta al consumo de gluten, pero no presentan las lesiones tisulares y la inflamación intestinal características de la enfermedad celíaca.
¿Por qué se vuelve uno intolerante al gluten ?
La intolerancia al gluten es una condición compleja y la causa exacta aún no se comprende bien. Sin embargo, hay varios factores que pueden contribuir al desarrollo de una intolerancia al gluten, entre ellos:
La genética: Algunas personas tienen una predisposición genética a la intolerancia al gluten; investigaciones han identificado varios genes que parecen desempeñar un papel en el desarrollo de la enfermedad.
Factores ambientales: tales como la infección viral, la cirugía intestinal, la toma de antibióticos, el estrés o una dieta muy procesada pueden contribuir al desarrollo de la intolerancia al gluten.
Desequilibrio de la flora intestinal: También llamado microbioma intestinal, pueden desempeñar un papel en el desarrollo de la intolerancia al gluten. Las bacterias intestinales ayudan a descomponer los alimentos, incluido el gluten, y un desequilibrio puede llevar a una mala digestión del gluten e inducir una respuesta inmunitaria anormal.
Trastornos autoinmunes: Las personas con enfermedades autoinmunes como la tiroiditis de Hashimoto, la diabetes tipo 1 y la esclerosis múltiple tienen un mayor riesgo de desarrollar intolerancia al gluten.